El tiempo
TEMAS PARA DEBATE

En esta sección queremos responder a las preguntas más frecuentes planteadas por los alumnos, combinando la preceptiva con la miscelánea, la información necesaria con la simple curiosidad. Todos los artículos exponen nuestra opinión personal y su contenido puede ser contestado mediante el buzón, que para eso está.


 El revés: una o dos manos
De todos los temas tratados en esta sección, el que despierta mayor interés y controversia es el que dedicamos al golpe de revés. Es probable que sin Roger Federer esta técnica se hubiese convertido en un vestigio del pasado sólo mantenido por algunos excéntricos. Pero la persistencia del suizo reclamó la atención de los nuevos tenistas sobre esta técnica que hoy vuelve a recuperar los niveles de hace una década. Te invitamos a conocer nuestra opinión sobre el tema y a leer la correspondencia mantenida con dos estudiantes interesados en él.
 Nuestro punto de vista
 Ricardo J. Rodríguez, estudiante de periodismo en Argentina
 Iker Carretero, estudiante del INEF en Vitoria
 El entrenador
Básicamente, hay dos tipos de entrenadores: los que aplican un método y los que tratan de entender al alumno. Los metodistas hacen un flaco favor al tenis porque consideran equivocado todo lo que se aparte de su método. Hay que poner los pies así, subir la mano asá, impactar la pelota en el punto X... Pero ocurre que el aprendizaje del tenis no es tanto una actividad de precepto como de poscepto. Lo que necesita el alumno no es alguien empeñado en encorsetarlo en patrones convencionales, sino un enamorado del tenis con unas buenas dotes de observación y comprensión que lo ayude a desarrollar sus condiciones, distintas a las de sus compañeros de clase. Es decir, alguien que acepte sin rasgarse las vestiduras que quien marca la pauta en el aprendizaje no es el profesor, sino el alumno. Por suerte, nadie pudo corregir a Borg o McEnroe; por desgracia, nadie pudo enseñar a volear a Lendl. Es lo que hay. Por eso los metodistas siguen sin fabricar decenas de federers al año y sin explicar por qué en el top10 no hay dos jugadores con la misma derecha, el mismo revés, el mismo saque.
ITF • Wayne Halliwell • Horst Wein
 Estrategia y táctica Leer
 Reglas de oro para plantear un partido y jugar cada golpe Leer
El partido duró cuatro horas, pero ¿cuánto tiempo estuvo la pelota en juego? Leer
 Alevines ITF Leer

EL ENTRENADOR
ITF - II Simposium Internacional para Profesionales de la Enseñanza del Tenis

«Busca un profesor que sea simpático, que no hable demasiado, que sea capaz de demostrar los golpes correctamente, que no enseñe sólo un modelo de juego o de técnica, que no abuse de sus alumnos, que busque el diálogo (si el alumno no está de acuerdo con el profesor no puede haber progreso; hay que hablar con el alumno, experimentar conjuntamente y obtener el permiso del alumno para intentar cosas nuevas) y, ante todo, el entrenador debe permitir que los alumnos evolucionen por sí mismos».

Los 20 factores de Halliwell
Wayne Halliwell, investigador de la educación deportiva, enumera 20 factores relacionados con la capacidad del entrenador de ser respetado por sus discípulos:
1. Experiencia previa como jugador de éxito
2. Experiencia previa como entrenador de éxito
3. Buena apariencia: vestido, forma física
4. Adecuados hábitos de vida: su conducta es un ejemplo
5. Buenos hábitos de trabajo: ajuste a los horarios, eficiencia
6. Capacidad organizativa: entrenamientos, reuniones, viajes, etc.
7. Capacidad comunicativa: explica con claridad, sabe escuchar
8. Disponibilidad: tiene siempre tiempo para el jugador
9. Conocimiento de los aspectos técnicos y tácticos del juego
10. Habilidad para enseñar y corregir errores técnicos y tácticos
11. Alta motivación: intensidad, compromiso, implicación
12. Carácter positivo: infunde ánimo, entusiasmo, elogios y refuerzos
13. Buen capitán de equipo: sus decisiones son comprendidas y aceptadas
14. Sentido del humor: fomenta un ambiente distendido
15. Capacidad de liderazgo durante el entrenamiento y el partido
16. Buen nivel de autocontrol: contagia calma y serenidad
17. Deseo de mejorar: aprende, investiga, se autoevalúa
18. Ecuanimidad con sus discípulos: no muestra favoritismos
19. Flexibilidad, abierto a sugerencias de jugadores y ayudantes
20. Sociabilidad: se interesa por los alumnos como individuos, conoce su vida fuera de la pista
Los 7 rasgos de Host Wein
Host Wayne, educador deportivo, resume en siete las cualidades esenciales del entrenador:
1. Buen nivel de conocimientos
2. Capacidad para motivar y organizar
3. Personalidad
4. Estabilidad emocional
5. Coherencia temperamental
6. Puntualidad
7. Entusiasmo

ESTRATEGIA Y TÁCTICA

A la hora de plantear un partido hay dos conceptos de gran importancia y que, sin embargo, suelen emplearse un tanto a la ligera: estrategia y táctica. Vamos a intentar exponer la diferencia entre ambos.

Para entender en qué consiste la estrategia podemos tomar el ejemplo de los corredores de fondo: el corredor con final explosivo no toma la cabeza de la carrera, sino que se mantiene al rebufo de otros esperando los metros finales para dar el tirón y dejarlos atrás; por el contrario, el corredor que carece de un buen final está obligado a cambiar de ritmo constantemente para descolgar a aquellos que lo ganarían al sprint. En tenis ocurre algo parecido: el jugador con poco fondo trata de forzar un desenlace rápido en cada punto, mientras que el jugador sobrado de fuerzas prefiere mantener peloteos largos que desgasten a su rival.

A través de este ejemplo ya habréis intuido que la estrategia es la planificación que hacemos de nuestro juego en base a una serie de conocimientos previos al partido, como son las características del rival (si tiene más o menos resistencia), la superficie de la pista (rápida, lenta), las condiciones atmosféricas (calor, frío, humedad). Y, por supuesto, las habilidades técnicas propias. Si un jugador con poca resistencia quiere resolver los puntos subiendo a la red, deberá tener una buena volea. Si no es así, hará mejor quedándose en el fondo para desde allí abrir ángulos buscando las líneas.

Al hablar de la elección de un golpe concreto dejamos el terreno de la estrategia (qué queremos) y nos adentramos en el de la táctica (cómo conseguirlo). Si la estrategia consiste en las grandes líneas, la táctica consiste en los pequeños detalles; si la estrategia está orientada a ganar el partido, la táctica se aplica a ganar un punto, un juego; si la estrategia se concibe antes de salir a la pista, la táctica puede improvisarse incluso en cuestión de segundos. Por ejemplo, un jugador abre un ángulo con la intención de dirigir el próximo golpe a la esquina contraria; de pronto se da cuenta de que su rival no ha reaccionado bien y que su devolución será forzada; cambia entonces de idea y sube a la red para rematar el punto con una volea.

En resumen, la táctica es el gesto técnico al que recurrimos para tomar la iniciativa en el tanto, bien atacando un punto débil del contrario, bien neutralizando su ataque.

En un partido, todos los golpes deben ser reflejo de una decisión táctica: mover al contrario de lado a lado para forzar su fallo o repetir el mismo lado para cogerlo a contrapié; defenderse de una subida con un globo, un passing o enviando una pelota baja que flote y le obligue a volear por debajo de la red; restar bloqueando la pelota o cruzarse para golpearla de derecha; contestar un ángulo con otro ángulo más acentuado; bloquear el golpe para ralentizar el juego y recuperar posiciones; cambiar de ritmo o de efecto…

El golpe más propicio para decidir una táctica es el saque. Al ser el único lance del partido en que nuestra acción no es una respuesta a un golpe del contrario podemos tomarnos un tiempo antes de optar por sacar al cuerpo o abrir un ángulo, subir a volear o permanecer en el fondo, elegir un efecto o golpear plano.

Valoración de la Estrategia

El juego de estrategia puede resultar frustrante para el alumno, al menos al principio. Si en cada partido tiene que explotar los puntos débiles de un rival distinto, su juego estará condicionado al del rival de turno y parecerá que carece de un estilo de juego «personal». En este punto, la misión del instructor es convencer al alumno de que para ganar un partido no basta con jugar mejor que el contrario. En la pista de tenis no se enfrentan dos gallos, sino un gato y un ratón. Y el jugador que mejor domine la estrategia será el gato.

También podemos promover el juego basado en la estrategia valorando su gran versatilidad frente a los esquemas limitados del juego personal. Este argumento es más académico, pero sólo funciona si los resultados acompañan.

Algo que puede ser de gran ayuda para conseguir una fusión espontánea de técnica, táctica y estrategia en el juego del alumno es darle una hoja con las reglas de oro del tenis, para que la consulte como si fuera un devocionario hasta haber interiorizado su contenido. En el apartado siguiente se muestra un ejemplo, aunque cada entrenador lo puede redactar a su criterio.


REGLAS DE ORO PARA PLANTEAR UN PARTIDO

1.

Hay dos formas de plantear un partido: haciendo valer tus mejores armas o atacando los puntos débiles del contrario. Puedes elegir cualquiera de ellas, pero recuerda que se ganan más puntos por errores del contrario que por aciertos propios.

2.

Busca un equilibrio entre defensa y ataque: el pasabolas raramente gana y el pegador suele perder.

3.

No te conformes con poner la bola en juego; ataca los puntos débiles del contrario, muévelo y evita la extrema colocación o potencia cuando has logrado desplazarlo.

4.

Mantén a tu contrario lo más alejado de la red.

5.

No juegues siempre al cien por cien de tu potencia; espera una bola apropiada para atacar.

6.

Juega pensando sólo en el punto que disputas.

7.

Evita jugar golpes arriesgados en los puntos importantes. Utilízalos cuando vas al menos dos puntos por delante. Lo que interesa no es ganar todos los puntos, sino ganar los puntos vitales.

8.

No te pases un partido intentando corregir un golpe; para eso están los entrenamientos.

9.

No cambies tu patrón de juego si vas ganando; sólo si pierdes.

10.

Si ganas el primer set con facilidad, no te relajes. Evita confiarte.

11.

No te entregues ante un resultado abultadamente adverso: la suerte puede cambiar. Si consigues empatar el partido, no te confíes.

12.

Evita jugar al ritmo que le gusta a tu oponente.

13.

Cuando tu oponente ha descubierto tu punto débil y te lo está machacando, trata de subir a la red; él jugará más precipitado y tú evitarás ejecutar esos golpes que venías fallando.

14.

No caigas en la trampa del jugador que trata de irritarte; ignóralo y concéntrate en el juego.

Cómo jugar cada golpe

1.

No descanses sobre los talones mientras la pelota está en juego: mantente alerta sobre la puntera de los pies y con las piernas flexionadas para arrancar con rapidez.

2.

Comienza a preparar tu golpe en cuanto golpee tu adversario.

3.

Mantén la vista siempre fija en la pelota.

4.

Apoya los pies en el suelo mientras golpeas (no te dejes deslumbrar por la imagen de un campeón flotando en el aire: tú no tienes su control).

5.

Balancea el cuerpo sobre la pelota en el momento del golpe.

6.

Corre hacia el lugar oportuno inmediatamente después de golpear.

7.

Al finalizar el punto relájate y afloja el agarre de la raqueta; incluso te ayudará cambiarla de mano.


TIEMPO REAL DE JUEGO

A menudo escuchamos un comentario asombrado acerca de la resistencia física de dos jugadores enfrentados en un partido maratoniano. Su esfuerzo ha sido grande, sin duda, pero no han estado todo el tiempo corriendo. El tiempo real de juego de un partido no suele alcanzar la cuarta parte del tiempo transcurrido desde el principio hasta el final. Así, en un partido de cuatro horas, lo normal es que los jugadores hayan estado en juego menos de una hora.

En la final masculina del Open USA 2004, que enfrentó a Federer y Hewitt, se disputaron 25 juegos. Los tiempos transcurridos fueron:

  Desde el principio hasta el final del partido
Con los jugadores en pie sobre la pista
Con la pelota en juego
111 min.
88 min.
24 min.
 

En la final femenina del mismo torneo, que enfrentó a las rusas Kuznetsova y Dementieva, se disputaron 21 juegos. Los tiempos transcurridos fueron:

  Desde el principio hasta el final del partido
Con las jugadoras en pie sobre la pista
Con la pelota en juego
98 min.
74 min.
22 min.
 

En ambos casos, el tiempo real de juego fue inferior al 25% de la duración total del partido, lo que concuerda con las estadísticas publicadas en 1988 por la ATP:

  Tiempo real de juego
Duración media de un punto
Promedio de puntos por juego
Promedio de puntos por set
Promedio de puntos de un partido de 3 sets
Distancia media recorrida por golpe (con saque)
Distancia media recorrida por golpe (sin saque)
Distancia media recorrida por punto
Distancia media recorrida en un set
Distancia media recorrida en un partido de 3 sets
22% del total
6-10 segs
6,2
62
186
3 mts
3,8 mts
8-12 mts
850 mts
2.550 mts
 

ALEVINES ITF

Piotr Unievzyski y Wieslaw Osinskyen, de la Escuela Universitaria de Educación Física de Poznan, Polonia, analizan los resultados obtenidos por los 133 mejores alevines de 20 países europeos. Las pruebas fueron realizadas hace más de una década, durante los años 1994-1997, pero tanto las referencias como sus conclusiones son perfectamente válidas en la actualidad.

La investigación consta de medidas antropométricas (peso, altura), test de motricidad (velocidad, agilidad, fuerza) y un cuestionario que combina factores sociales (dimensión de la ciudad en que viven, distancia desde su casa al centro de entrenamiento, nivel cultural de sus padres) y factores deportivos (a qué edad empezó a entrenar, horas semanales y anuales dedicadas a entrenar y competir, dieta, presupuesto).

Estos fueron los datos básicos de los 30 mejores jugadores:

  Altura (cm)
Peso (kg)
Velocidad (20 mt, seg)
Fuerza explosiva (salto de longitud con pies juntos, cm)
Horas entrenamiento por semana
Horas preparación física por semana
Horas anuales de entrenamiento + preparación
Número de partidos jugados el año anterior (singles)
A qué edad empezaron a entrenar (años)
A qué edad jugaron su primer torneo
A qué edad jugaron su primer torneo en el extranjero
155,9
41,5
3,43
190,3
12,6
4,4
858
67
5,4
7,2
10,6
 

Comparando estos datos con la media, los autores del estudio pudieron comprobar que los jugadores con mejor nivel de juego:

• Eran más altos, más delgados y con más peso
• Dedicaban mayor número de horas a su entrenamiento
• Tenían mejor motricidad, potencia de piernas, velocidad y agilidad
• No afectaba a su nivel de juego el orden de nacimiento, las dimensiones de su ciudad, la situación económica o la
  afición de sus padres al deporte (aunque sí su formación cultural)

En cuanto al conjunto de los jugadores analizados, los investigadores pudieron hacer las siguientes comprobaciones:

  Habían empezado a los 7 años o antes
Entrenaban al menos 14 horas semanales
Participaron en su primer torneo a los 9 años o antes
Habían jugado torneos internacionales en el extranjero
61%
70%
76%
85%
 

Según estos datos, los factores que más influyen en el nivel de juego están relacionados con la experiencia: edad a la que se empieza a practicar, tiempo dedicado a entrenar y número de partidos jugados. No obstante, sería equivocado creer que la cantidad es lo único que importa. En un apartado muy interesante de este estudio los autores comparan los perfiles de los dos mejores jugadores analizados:

Jugador nº 1

• Empezó a entrenar a los 5 años.
• Con 11 años jugaba un centenar de partidos anuales.
• Practicaba 40 horas semanales.
• Inmerso en la competición no desarrolló correctamente factores como velocidad, agilidad y coordinación.

Resultado: Dos años después era un jugador mediocre aquejado por un sinfín de lesiones.

Jugador nº 2

• Su edad de comienzo, número de partidos y horas de entrenamiento eran similares a la media.
• Tuvo un buen desarrollo de velocidad, agilidad y coordinación.
• No presentaba ninguna laguna técnica.

Resultado: Alcanzó un mejor futuro como jugador.

Conclusión: Quemar etapas puede acortar la carrera del tenista