Renée Richards y Betty-Ann Stuart han alcanzado la final del Open USA en su cuadro de dobles femenino. El impacto deportivo y social de la noticia reside en que pocos años antes la tenista Renée Richards jugaba en los cuadros masculinos como Richard Rasking.

Richard Rasking nació en Nueva York, en 1934. Aparentemente, su infancia y juventud fueron las de un niño cualquiera. Posteriormente se doctoró como cirujano oftálmico, sirvió en la Marina con el grado de comandante, se casó, tuvo un hijo… Richard compartía su vida profesional y afectiva con su afición al tenis, si bien los resultados conseguidos en este campo lo decepcionaban. Tras una década de vacilaciones, en 1975, recién cumplidos los cuarenta, Richard se sometió a una operación de cambio de sexo. Dos años después, una tenista desconocida, Renée Richards, ganaba un torneo en California. Como era de esperar, la complexión de esta jugadora suscitó numerosos comentarios acerca de su masculinidad. Richard Rasking había cambiado su sexo, pero no su osamenta. Cuando se supo que Richard y Renée eran la misma persona el revuelo alcanzó tales dimensiones en el mundillo del tenis femenino que la organización del Open USA vetó su participación en el torneo. Renée llevó el caso a los tribunales y lo ganó, alcanzando la final femenina de dobles junto a Betty-Ann Stuart. Sus rivales en la final fueron Martina Navratilova y Betty Stöve, que ganaron por 61 76.

Un detalle: Renée significa en francés “renacida”, “nacida de nuevo”.

PD. Renée aún jugó en otras cuatro ediciones del Open USA. En 1978 llegó a cuartos en individuales, y en febrero de 1979 ascendió al #20 del ranking. En 1982 dejó el tenis para volver a la medicina. Pero su caso sacó a la luz un tema que hasta ese momento había permanecido soterrado. En 1981, Martina Navratilova reconocía abiertamente su homosexualidad, y ese mismo año se sabía que Billie Jean King, casada al modo tradicional, mantenía relaciones con su secretaria Marilyn Barnett, idilio descubierto a causa de una disputa de bienes. La lucha de Billie Jean por los derechos de los homosexuales ha sido premiada por Barack Obama con la medalla presidencial de la Libertad. También Amelie Mauresmo reconoció su condición homosexual en 1999 cuando, tras vencer en la final del abierto australiano a Martina Hingis, ésta la acusó de ser medio hombre.

En 1986, Vanessa Redgrave encarnó el personaje de Renée Richards en la producción televisiva “Segundo servicio”.